El hecho se produjo anoche cuando la vicepresidenta llegaba a su domicilio; el hombre, de 35 años, apretó el gatillo dos veces
Un hombre de 35 años fue detenido anoche después de apuntarle con un arma cargada a la vicepresidenta Cristina Kirchner mientras saludaba a sus seguidores en la puerta del edificio en el que vive, en Juncal y Uruguay, en Recoleta.
Fernando Andrés Sabag Montiel estiró su brazo y le apuntó de frente a la vicepresidenta de la Nación, gatilló dos veces, pero la bala no salió. Cristina Kirchner atinó a agacharse, la custodia lo arrinconó contra la pared y lo detuvo.
A pocos metros del lugar se halló un arma Bersa calibre .32 auto (7.65 mm), apta para el disparo, según confirmaron fuentes oficiales.
De acuerdo con la información a la que accedió LA NACION, el autor del intento de magnicidio pudo ser identificado poco tiempo después. Es un ciudadano de nacionalidad brasileña de 35 años. Contaba con un antecedente por portación de armas no convencionales, fechado el 17 de marzo de 2021.
El individuo estuvo dentro de una patrulla por varias horas y fue trasladado a una dependencia policial para llevar a cabo las correspondientes indagaciones.
Integrantes de la militancia contaron a este medio que a la vicepresidenta le gatillaron pero no salió ningún disparo. “Estábamos con la algarabía de ver a nuestra líder cuando de golpe hubo un tumulto. Estábamos haciendo un cordón con los compañeros y de repente, sin mediar palabra, el hombre gatilló. Él le puso el revolver enfrente. Cristina se agachó y varios, entre militantes y custodia, lo redujeron”, precisaron.
En el video difundido por redes sociales, se puede ver el momento en que los agentes que protegen a la titular del Senado arrinconan al hombre, advertidos por los manifestantes.
También se pronunció sobre el hecho el abogado de Cristina Kirchner Gregorio Dalbón. “Esto quiere decir que se toman en joda todas las cosas que le dicen a Cristina, todas las amenazas, meter bala. Evidentemente este es el resultado de los odiadores. Vamos a ir al fondo de la cuestión por que se trata de la vicepresidente”, criticó.
Al reproche se sumó la presidenta de la Cámara de Diputados, Cecilia Moreau: “Es el producto de los días que venimos viviendo, de las incitaciones al odio. La imagen es terrible por la reacción de Cristina”.
El caso está siendo investigado por la jueza María Eugenia Capuchetti. Interviene también la Fiscalía N°10. Producto del incidente, la Policía Federal Argentina formó un cordón policial. Minutos después, la Policía Científica arribó al lugar y desplegó un toldo. Cercaron el área con cintas de “escena del crimen”. Entre patrulleros -ploteados y no- y camiones de brigada antiexplosivos, al menos una docena de vehículos de la Policía Federal se hicieron presentes sobre la calle Uruguay.
Tras el impacto y la conmoción, las miradas de los manifestantes no se despejaban de los teléfonos. Cabizbajos, quienes acompañaban con su apoyo a la vicepresidenta desde el lunes 22 de agosto por la noche no podían disimular el asombro y la angustia. En consecuencia, unos 30 militantes formaron un cordón, en la intersección de Juncal y Paraná.
En esa línea, y hacia las 23, más gente se agolpaba en la intersección de Recoleta, a la espera de obtener precisiones e información. Entre ellos, el integrante del Frente Patria Grande, Juan Grabois -quien esta semana decidió apartarse del Frente de Todos por diferencias en la toma de decisiones- y el ministro de salud bonaerense Nicolás Kreplak.
El hecho se produjo 24 horas después de la detención de un repartidor que pasaba por el lugar y comenzó una pelea con los militantes tras lanzar cantos contra Cristina Kirchner.