Confirmado: Miguel Ángel Pichetto será el candidato a vicepresidente de Mauricio Macri

Confirmado: Miguel Ángel Pichetto será el candidato a vicepresidente de Mauricio Macri

FacebookTwitteremailPrintEl oficialismo busca así mostrar amplitud en su pelea contra el kirchnerismo y una respuesta ante el acuerdo de Massa con Fernández-Fernández.  Miguel Ángel Pichetto será el compañero de fórmula deMauricio Macri, según reveló hace instantes a Clarín una altísima fuente de la Casa Rosada. El anuncio oficial sería inminente. Macri se reunió innumerables veces en el año con Miguel Ángel Pichetto. Ya se […]

El oficialismo busca así mostrar amplitud en su pelea contra el kirchnerismo y una respuesta ante el acuerdo de Massa con Fernández-Fernández.  Miguel Ángel Pichetto será el compañero de fórmula deMauricio Macri, según reveló hace instantes a Clarín una altísima fuente de la Casa Rosada. El anuncio oficial sería inminente.
Macri se reunió innumerables veces en el año con Miguel Ángel Pichetto. Ya se han publicado los profusos elogios que el Presidente le dedica al inoxidable senador peronista. Con un eje fundamental:defiende al Gobierno mejor que varios de los propios.
Y no solo en la esgrima cotidiana, tanto en el Senado como en radios y tevé, sino como hizo dos meses atrás, en Washington, delante de operadores e inversores neoyorquinos. Eso, dicen, terminó de convencer a los que se resistían a llevar a un peronista en la fórmula.
Por eso, cuando habla Pichetto todo es música para los oídos de funcionarios como Rogelio Frigerio (más acostumbrado a la rosca con el peronismo) o del propio Marcos Peña, un defensor a ultranza del estilo puro del PRO y sus aliados.
Enfrentado hace tiempo con Cristina Fernández de Kirchner, y distanciado desde hace poco de Sergio Tomás Massa, por su acercamiento definitivo a los K, Pichetto se transformó en un nombre que mostraría la apertura que necesita Cambiemos en este turno electoraldonde el riesgo de una derrota (incluso en primera vuelta) se ha transformado en algo latente.
Así, el nombre de Pichetto se convirtió en los últimos días en el preferido de Macri y Peña para mostrar criterio de amplitud y búsqueda de electores independientes y del peronismo.
Para este cierre con el peronista nacido en Banfield pero radicado políticamente en Río Negro, Macri y Peña habían recibido el visto bueno de María Eugenia Vidal y Horacio Rodríguez Larreta, el resto de los integrantes de la mesa ultra chica del poder actual.
Pero además, ese núcleo aceitó el acuerdo del resto de sus aliados: los principales dirigentes de la UCR y Elisa Carrió, ya dijeron que no objetarán a Pichetto como compañero de fórmula de Macri.
Puertas adentro de la Casa Rosada, en los últimas semanas se venía hablando bastante de quién podía ser el hombre o la mujer que debía acompañar al Presidente. Una cuestión en la que, además de Marcos Peña y los aliados del radicalismo, opinaban con frecuencia Jaime Durán Barba y su equipo.
Había dos tipos de perfiles en discusión. Uno, el que se ha impuesto desde que Macri llegó a la jefatura de Gobierno porteña: esto es, un candidato “blando”, complementario a la personalidad del líder de Cambiemos, preferentemente una mujer. En este caso, nunca importó que se tratara de figuras poco conocidas, más bien al contrario. Durán Barba ha buscado siempre hacer de eso una fortaleza: así ocurrió con Gabriela Michetti en el primer período y con María Eugenia Vidal en el segundo.
Estuvieron bajo análisis distintas mujeres, incluso hasta la propia Michetti fue durante todo el año pasado la que llevó ventaja y hasta hace muy poco era la preferida del Presidente, seguida por la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich. Carolina Stanley, la ministra de Desarrollo Social, fue una opción de un sector, pero nunca prosperó realmente.
Pero post Convención de la UCR se analizaron distintos perfiles de mujeres, con origen en ese partido. Entre ellas, estuvieron bajo la lupa la diputada Karina Banfi, la vicegobernadora de Mendoza, Laura Montero, y la senadora Pamela Verasay.
El otro perfil de postulante estaba pensado para dar señales al establishment, que viene pidiendo más apertura en Cambiemos. Con ese eje se pensó en nombres como el de Rogelio Frigerio y Emilio Monzó, en peronistas de otros espacios (el preferido era Juan Manuel Urtubey, pero el gobernador de Salta salió enseguida a despegarse de los rumores) y en radicales con nexos en el empresariado, como Ernesto Sanz. Algunos imaginaron un extrapartidario, ya sí con perfil popular, pero escapaba a la lógica que aspira Macri de contar con una persona de “suma confianza”.
“Ningún candidato de todos los que analizamos le aportaba votos a Mauricio. La fórmula está eclipsada por él. Lo que puede ocurrir y es lo que esperamos es que, durante la campaña, el vice sea una revelación y le aporte un sello distintivo al binomio”, suele explicar un dirigente que trabaja en el PRO casi desde su creación.
Pichetto ha dado muestras claras sobre su actual alineamiento: “El ciclo de Macri termina en 2023”, le dijo este lunes en el programa de TV de Carlos Pagni.

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