Cómo ven a Bordet en la campaña

Cómo ven a Bordet en la campaña

FacebookTwitteremailPrintEn Juntos por el Cambio notan que el gran elector en los recientes triunfos provinciales del peronismo no es un protagonista central en la campaña para las primarias de agosto. Eso los alienta. Algunos se atreven a opinar que al Gobernador no le disgustaría seguir con Macri.   “El día que se sacó la foto […]

En Juntos por el Cambio notan que el gran elector en los recientes triunfos provinciales del peronismo no es un protagonista central en la campaña para las primarias de agosto. Eso los alienta. Algunos se atreven a opinar que al Gobernador no le disgustaría seguir con Macri.
 
“El día que se sacó la foto con Alberto (Fernández) y los gobernadores, a la tarde fue con (Rogelio) Frigerio y le dijo que iba a hacer la plancha. Y eso hizo: se tomó vacaciones. (Gustavo) Bordet ha hecho poco y nada en la campaña. Recién se mostró en un acto a quince días de las elecciones”. 

El autor del comentario es un dirigente entrerriano de Juntos por el Cambio, de extracción macrista. En diálogo informal con Página Política, opina que el gobernador especula con la moneda al aire de la elección presidencial. “No le fue mal con Macri, ha recibido mucha plata, lo ha llevado a muchos viajes”, destaca. 

Otro dirigente de Juntos por el Cambio, en este caso de origen peronista, coincide y redondea la idea: “A Bordet le conviene seguir con Macri. Si gana Fernández – Fernández va a tener que cogobernar con (Sergio) Urribarri, (Julio) Solanas y (Blanca) Osuna. Se le despelota la interna en la provincia”. 

“Va a especular, como bien sabe hacerlo. Si ve que viene la oleada para Macri, se va a hacer el distraído. Y recién va a poner toda la carne en el asador si ve que los Fernández tienen posibilidades ciertas de llegar”, opina. 

También en la UCR perciben que Bordet “no está haciendo nada” en la campaña. Y lo entienden. Ya fue reelecto con el 57% de los votos, el porcentaje más alto para un gobernador entrerriano desde 1983. ¿Para qué arriesgarse involucrándose en una elección que no es suya, que tiene como actores centrales a los dos polos de la política argentina?
“Relación virtuosa”
Oficialistas y opositores entrerrianos coinciden en que un eventual nuevo triunfo peronista en agosto y octubre no tendría en Entre Ríos las magnitudes de abril y junio, cuando Bordet logra la reelección con 22 puntos de ventaja sobre Cambiemos.
 
Esta es otra elección. Es nacional, presidencial y ultra polarizada. Las primeras mediciones conocidas pronostican que el resultado en la provincia se parecerá más al resultado nacional, sin mucha ventaja de uno sobre otro. 

¿Qué es lo peor que le podría pasar a Bordet? Que pierda el peronismo. En tal caso, lo que habrá ocurrido será que Macri continuará ganando en Entre Ríos, algo que viene haciendo desde 2015. Y Bordet –dicen en Cambiemos- podrá prolongar en su segundo mandato lo que ya conoce: su “relación virtuosa” con Macri, que “fue mucho más federal que Cristina” con las provincias. 

No creen que un resultado adverso le haga a Bordet licuar el capital político del 57% con el que fue reelecto. Los responsables de la derrota serán, en todo caso, Alberto y Cristina. De ellos es esta elección, y más claro quedará ese concepto cuanto más moderado sea el rol de Bordet en la campaña. 

Por lo demás, el Gobernador armó la lista de candidatos al Congreso. Pero lo hizo en acuerdo con el kirchnerismo. Dos bancas para cada uno.


Perdiendo, Bordet no vería afectada su representación en el Congreso. Ingresarían sus dos candidatos: Edgardo Kueider en el Senado y Marcelo Casaretto en Diputados. También la cristinista Blanca Osuna, claro.
 


La única baja que sufriría en el caso de una derrota sería la de Stefanía Cora, la joven promesa entrerriana de La Cámpora, que va segunda en la lista de senadores. En suma, es eso lo que define esta elección tan polarizada en Entre Ríos en materia de representación parlamentaria: quién se queda con dos bancas en el Senado, ya que los cuatro diputados se repartirán en partes iguales.

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